El día que los canguros visitaron el hormiguero

Corría el mes de octubre de 1987 y los Wallabies luego de haber sido co-anfitriones de la copa del mundo de la World Rugby Union, se preparaban para una gira del otro lado del charco que incluía varios partidos en Argentina.

Se jugaría en varios puntos del país y la sorpresa fue que el club elegido para ser anfitrión en el encuentro con el Seleccionado del Interior, fue Marabunta RC. Las hormigas estaban encargadas de recibir a toda la comitiva, que sumaba australianos, argentinos, dirigentes y jugadores (alrededor de 80 personas). La familia del verde y los fanáticos del rugby trabajaron incansablemente para que todo saliera perfecto.

Fue una experiencia inolvidable para quienes pudieron ser parte y aquí compartimos algunas de esas historias contadas por sus protagonistas.

 

Facundo Bancora

“El Coach visitante, Alan Jones, había pedido un pack para hacer scrum contra los australianos en entrenamiento, por lo que la Unión convocó al los fowards del seleccionado del Alto Valle.

La cita fue para las 10 de la mañana, y allí estaban los jugadores más representativos de los packs de los clubes locales, pero de los australianos ni noticias….

11.30 aproximadamente y nada (no habia whatsapp, ni celulares, al menos en Cipolletti…) los «gordos valletanos» emprendieron la retirada cansados de esperar.

Media hora más tarde, llega al club el colectivo con los Wallabies, el Topo Rodriguez y Tom Lawton, Cutler y Simon Poidevin entre otros.

¿Y quiénes estaban dando vueltas? La M19 de Marabunta, clase 1970/1971.

Rapidamente fueron convocados al entrenamiento de fowards.

Día inolvidable para muchos en la cancha 1 de Marabunta.”

 

Fernando Salvade, 2 línea

«Yo recuerdo que haciendo un ruck, uno de los pilares (quiero acordarme que era Andy McIntyre) me pisó el muslo y me cortó.  Por semanas me arrancaba la cascarita para que se me hiciera cicatriz y me quedara grabado ese momento para siempre.  No me quedó cicatriz…

También me acuerdo que todo nuestro pack tenía las piernas estiradas al máximo y ellos nos movían como si fuéramos de paja. Se nos salían las venas para aguantarlos.»

 

Maxi Benzadon, pilar.

«Me acuerdo que yo formé contra el Topo Rodríguez y Tommy Lawton. Los cuellos eran tan anchos como nuestros hombros!. La anécdota de color, fue que fue tanta la fuerza que hicimos, que en mi caso se me formaron petequias en todo el cuerpo y por esa razón, me hicieron una entrevista para un diario de Australia, en la que Marce me sirvió de traductor y el Topo me regaló un pantaloncito de los Wallabies que todavía tengo”

 

Matías Ezcurra, ala.

«En esos días estábamos todos en e club muy ansiosos, los que trabajaban en la cancha para que este impecable el día del partido, los que ponían en condiciones el club en general para recibir a mucha gente y nosotros que estábamos los días previos acompañando y por que no, persiguiendo al plantel de Australia hasta dentro del hotel (literalmente) para poder ligar aunque sea unas medias de regalo. En esos días se nos notaba la fascinación en la cara y con 17 años y la cabeza «ovalada» de tanto rugby, no nos despegábamos de ellos ni un minuto tratando de ayudar, de acompañar o de resolver cualquier situación para que se sientan cómodos.

Y para coronar esa previa, convocan a la M19 para ayudarlos a hacer contact y scrum, ya que la primera se había ido a Bariloche. Ese año estábamos agrandados, para que negarlo, habíamos ganado todo pero ahora se nos presentaba algo para lo que nunca nos habíamos preparado, entrenar con los Wallabies!!!!, no lo podíamos creer. Debe haber sido menos de una hora y fue solo fijar posiciones y tratar de ayudarlos a que puedan hacer sus movimientos en formaciones fijas y móviles, no nos daban los brazos para envolverlos, eran enormes!!!

El scrum fue toda una ceremonia en la que la primera linea tuvo el mayor de los sacrificios, formar contra Tomy Lawton (el cuello de ese Hooker tenía la circunferencia de mi cintura) o contra el Topo Rodríguez (nuestro Maradona de la 1era línea Puma jugando en Australia) fue realmente increíble y cargado de mucha emoción para nosotros.

Cuando terminó el entrenamiento nos dieron algunos regalos que me imagino todos guardamos en alguna parte y seguro para siempre en la memoria.

Después de eso vino el partido, que fue el evento más importante que tuvo el club en su historia, o por lo menos en la que conozco y todo fue una fiesta, pero nosotros habíamos tenido un partido aparte dos días antes. Para mi fue uno de esos días que te regala el rugby y que no te los olvidás nunca en tu vida.»

 

Carlos Rimmele, hooker

«Cuando nos enteramos que íbamos a ser sparring de los Wallabies en el scrum y formaciones móviles no lo podíamos creer.

Empezamos a calentar y nos estaban esperando para comenzar con los scrum, cuando nos paramos frente a su primera linea que formaban el Topo Rodriguez ex Puma (Pilar Izquierdo), Tommy Lawton (Hooker) y M. Hastill (Pilar Derecho) recuerdo que no tenían cuello, eran enormes con muchos kilos encima.

Cuando nuestras cabezas entraron entre sus hombros sentíamos esa compresión y kilos que nos quintuplicaban seguramente, y lo único que nos podía mantener en posición, era la fuerza de la cabeza sobre sus pechos, recuerdo también que en el scrum, la formación de empuje de ellos eran cinco, los alas y el octavo no participaban, y nosotros para compensar éramos los ocho y a veces se sumaban dos más, porque sino nos empujaban hasta el río, no recuerdo de haber formado un scrum tan bajo y con un empuje tan horizantal, por supuesto nos acomodaban ellos, eran unos fenómenos. Ese día fue una locura, tener a estos monstruos en frente fue algo que uno no puede olvidar jamas.»

 

En las fotos: Carlos Rimmele, Fernando Salvade, Martillo Montero, Matías Ezcurra, Rodolfo Rivarola, Maxi Benzadon, Javier Vega.